Prueba :: Audi S5

Audi entro en el segmento de los coupés con el A5, un modelo derivado del A4 con vocación deportiva pero una habitabilidad correcta, el máximo exponente de la gama es el S5, la versión deportiva, con las mejores prestaciones, mayor precio y máxima exclusividad.

La exclusividad se aprecia con el primer golpe de vista, unas inmensas llantas, apéndices aerodinámicos y el V8 en los laterales hacen inconfundible a este coupé superdotado.

Cuando entramos en su interior, el aroma a exclusivo nos invade, los acabados rozan al máximo nivel, el confort de sus butacas delanteras es elevado y la presentación muy cuidada.

Una vez puestos al volante, regulado espejos, asiento y volante, llega el momento de encender a la bestia, pulsamos el botón de encendido y un sonido ronco sale del escape, el V8 se ha despertado, todos los transeúntes se giran a ver qué tipo de artefacto hace ese ruido, más propio de un Ferrari, Jaguar,.. u otros deportivos. Una vez disfrutado del embriagador sonido del propulsor toca pasear al pequeñín, ponemos el selector de nuestro cambio automático en la D y pisamos levemente el acelerador, el S5 se mueve entre el tráfico suavemente, hasta demasiado, con unos consumos que en ciudad se sitúan entorno a los 12 litros pero que en carretera y a ritmos legales y con la D asombran, ya que se sitúan entorno a los 7-8 litros a 80-90 Km/h, vaya como un 2 litros de 140 caballos… muy interesante, además el ruido que llega al habitáculo es realmente mínimo.

Transcurridos unos kilómetros, llegamos a Ribes de Freser, población dónde inicia la Collada de Toses, nuestra prueba de fuego con el S5, son apenas las 9 de la mañana y la carretera está vacía, así que seleccionamos el modo S de nuestro cambio y nuestro S5 se convierte en una bestia, aprovechando mejor las posibilidades del V8 de 350 caballos, las curvas se suceden y la sensación de seguridad es total, el paso por curva es asombroso y como no tenemos que estar pendientes del cambio podemos disfrutar totalmente de la carretera, revirada y con buen firme, pocas veces hemos podido disfrutar tanto ya que además apenas encontramos trafico, y los que encontramos, sucumbieron a nuestra superioridad prestacional. En pocos minutos nos plantamos en la parte superior del puerto, dejando atrás 26 kilómetros de pura diversión. La bajada decidimos hacerla usando el cambio secuencial, que permite apuradas de frenada y un uso mayor del propulsor, eso es a cambio de un mayor consumo. Una vez de vuelta a Ribes de Freser llegamos a la conclusión de que el modo Sport del cambio es superior además el consumo de subida apenas subía de los 11 litros, por casi 13 de la bajada en “manual”. En estos propulsores estos cambio automáticos modernos son muy interesantes, ya que desde Ribes a Barcelona, que es todo bajada el poderoso S5 nos gastó 6,3 litros, y no es broma, eso si apenas pasaba de las 1500 revoluciones y a velocidades entorno a los 80 en sexta…

Pocos coches nos han hecho disfrutar tanto conduciéndolos, su seguridad, aplomo y confort están muy por encima de la media y es remarcable el trabajo de la casa de Ingolstadt, en busca de un equilibrio entre comportamiento y confort de sus ocupantes.

Habitabilidad
El S5 es un 2+2 o lo que es lo mismo delante vamos nosotros y detrás los niños o las suegras, para que sufran. El espacio trasero es mínimo no por anchura ni altura sino por el acceso y el espacio para las piernas.

El maletero en cambio es grande y espacioso, con una boca de carga justa, pero al mismo nivel de sus competidores

Delante es cómodo, con un acceso de deportivo, o sea bajo y con una posición un tanto estirada pero una vez dentro ningún reproche, todo está en su sitio, a mano y con un tacto excelente de mandos y botones.

Los materiales son de la mejor calidad y nuestra unidad de pruebas se parecía a un Ferrari 456 con la piel de color Marrón rojizoy la disposición de las butacas, muy bonito.

Motor
Ya hemos comentado las bondades del bloque de ocho cilindros en V de inyección directa de este Audi, rápido, progresivo y con una buena sintonía con el cambio automático, que permite tener un dos en uno, un coche para el día a día y un deportivo para cuando queramos.

Los 350 caballos nos permiten una conducción relajada en todas las situaciones, el motor va sobrado y siempre tiene potencia disponible.

Este 4,2 litros es uno de los mejores propulsores que hemos probado, globalmente es excepcional.

Comportamiento
Si no ha quedado claro el S5 es eficaz allí dónde lo metamos, en autopista, carretera o ciudad, la ayuda inestimable del sistema de tracción Total Quattro y las ayudas electrónicas lo sitúan en otro nivel respecto a los coches “normales” que todos tenemos en nuestro garaje.

Competencia
Si hablamos de competidores de Audi siempre acaba saliendo la marca bávara BMW en este caso el 650, pero no debemos olvidarnos de Jaguar con su XK. El más económico es nuestro visitante de hoy, ya que por poco más de 60.000 euros podemos disfrutar de él, pero tenemos claro que este tipo de vehículos nadie se los compra por precio sino que es una compra emocional, dónde nada tenemos que decir.

Calidad-Precio
Sonará extraño que digamos que un coche que cuesta más de diez millones de las antiguas pesetas tiene una excelente relación calidad precio pero la verdad es que si miramos el precio por caballo es mejor que un A3 1,6 y su equipamiento, motor e imagen no tiene nada que ver…

Ficha técnica