Prueba: Chevolet HHR 2.4 170cv

Lo retro está de moda, y esta moda ha llegado al mundo del automóvil de la mano de varias marcas, Volkswagen con su Escarabajo, Mini,… pero todos estos vehículos pecaban de falta de espacio y practicidad, Chevrolet, una marca multinacional con raíces americanas, ha tomado como base los famosos “techos Altos”, muy normales en las décadas de los 50 y 60 en las Carreteras americanas.

Básicamente está entre un familiar alto y un monovolumen, con buena habitabilidad, confort y capacidad de carga. Su aspecto le hace ser objeto de todas las miradas.

Diseño
No nos engañaremos el HHR es un coche diferente, con personalidad, inconformista y rebelde, y este es su cliente tipo, alguien que no le guste pasar desapercibido, y que no quiera saber nada con tendencias. Su concepto crea opiniones contrapuestas, hay quien lo aborrece y otros que les gusta. Sin duda es especial, con un capó elevado, ventanas pequeñas, un tablier pequeño y muy vertical, volante grande y ruedas de gran tamaño. Creemos que cada uno tiene que hacerse su opinión del controvertido Chevrolet.

Interior
En la línea de las otras creaciones americanas, no disfruta de una calidad de terminación europea, los materiales son robustos, pero tienen un tacto poco agradable. El diseño es sobrio, siguiendo un poco la línea retro del resto.

La posición de conducción es muy buena, confortable, y fácil de conseguir. Los mandos de las diferentes funciones, no han sido ordenados con mucha gracia, los elevalunas se encuentran entre los asientos delanteros y la consola central se encuentra un poco baja. Hay que alabar la calidad de sonido de la radio, además es muy sencilla de funcionamiento.

Los asientos no agarran en exceso en las curvas pero son cómodos y de buenas dimensiones.

Detrás hay buen espacio para tres adultos, que disfrutarán de un gran confort.

El maletero es excelente, tanto por formas como por capacidad.

Motor
De origen claramente americano, con una cilindrada elevada, 2,4 litros y una potencia teórica de 170 cv, se muestra muy suave y silencioso, pero nada deportivo. Acoplado a una caja de cambios de relaciones más bien largas es un motor eterno para quienes conduzcan tranquilamente, que por su cilindrada y par a bajos régimenes, se tercia mucho su uso con marchas largas. Eso si, si debemos adelantar o acelerar es impepinable reducir de marcha.

El consumo mixto durante la prueba ha sido de 7.7 litros, bueno en términos generales, pero muy sensible a las revoluciones del motor. En ciudad gasta por encima de 9 litros, pero en carretera y a velocidades legales, es fácil bajar de 7. Para tener 170 caballos el consumo es bueno.

Comportamiento
Como hemos comentado es muy americano, con suspensiones suaves, aunque no blandas, y un enfoque mucho más turístico que prestacional. En ciudad es muy suave y fácil de callejear con él, su dirección permite maniobras precisas y estacionamientos fáciles.

El Autopista la dirección un tanto floja, nos obliga a estar atentos, pero el coche se muestra aplomado y gracias al confort de sus asientos y de la acústica, permite hacer viajes largos descansadamente.

En carretera de montaña o tramos virados hay que ahuecar un poco el acelerador, ya que si entramos fuertes en las curvas subvira bastante y la carrocería se inclina. No es un coche de rallyes, está pensado para una conducción tranquila, a ritmos legales.

Competencia
Su única competencia real es el Chrysler PT Cruiser, pero pensamos que el HHR es más recomendable, ya que a igualdad de precio, ofrece un mejor equipamiento, motor más potente y tiene un comportamiento parecido.

Calidad/precio
Sería feo decir que este coche es un capricho, bueno en parte lo es, pero como comentamos en el inicio, ofrece argumentos suficientes para que se le pueda valorar por otros factores. Su precio es alto 30.000 euros, pero su equipamiento también, ya que ofrece tapicería de cuero, control de crucero, ESP, llantas, climatizador, … y un motor de 170 cv. Si te encaja, valorando los pros y contras, no dudamos que el Chevrolet será tu compañero por muchos años.