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Prueba BMW 220i Active Tourer

Prueba BMW 220i Active Tourer

Los monovolúmenes no están en su mejor momento de ventas, pero un servidor sigue siendo un gran defensor de este tipo de vehículos que nos ofrecen una gran habitabilidad y capacidad de carga sin perder el buen comportamiento de una berlina o compacto. Es el caso de este BMW 220i Active Tourer además le sumamos el lujo, la calidad de realización y de rodadura de un BMW y una lista de opciones para personalizarlo que abrumará a cualquiera.

El Active Tourer nació en 2014, dividiendo a los seguidores de la marca, por su diseño de furgoneta, su tracción delantera.. pero tras vender más de 420.000 unidades a nivel mundial, el Serie 2 Active Tourer parece que gustó a quien debía gustar y ha funcionado comercialmente. Su segunda generación es mucho más que una evolución, ya que mejora en todos los apartados desde la tecnología o la polivalencia, pero también en lo que se refiere a sus propulsores, ahora más ecológicos pero sin perder la esencia deportiva de la marca Bávara.

BMW Serie 2 Active Tourer no es un coche que pase desapercibido. Con el cambio generacional gana un diseño más deportivo, con líneas dinámicas y marcadas, además de un frontal que es más similar al de otros modelos de la gama. La similitud con los Serie 4 se ve rápidamente, pues la parrilla de riñones crece en dimensiones y adopta una disposición más vertical. Ambos riñones van integrados en el mismo marco cromado y tiene aerodinámica activa para dejar pasar el aire en función de las necesidades.

A pesar de tratarse de un monovolumen, el BMW Serie 2 Active Tourer tiene una imagen bastante “pintona”.

Las dimensiones del Serie 2 Active Tourer no cambian demasiado con una longitud de 4.386 mm (32 mm más), a una anchura de 1.824 mm (22 mm más) y a una altura de 1.576 mm (10 mm más). Eso sí, la distancia entre ejes se mantiene en los mismos 2.670 mm que ofrecía su antecesor.

De puertas adentro la evolución es incluso más marcada que por fuera. Se inspira claramente en el BMW iX en la disposición de sus elementos y en la introducción del BMW Curved Display de serie. Como su nombre indica, se trata de la nueva configuración de doble pantalla en el mismo plano curvo, logrando un diseño más limpio. Tenemos a la izquierda una instrumentación digital de 10,25 pulgadas y a la derecha una pantalla táctil de 10,7 pulgadas para controlar el resto de funciones del infoentretenimiento.

Cuenta con el sistema operativo BMW iDrive (ID 8) más reciente de la marca y eso se nota en la rapidez de respuesta. La sensibilidad de la pantalla es alta y los menús bastante intuitivos. La conectividad también es un punto mejorado, al contar tanto con Android Auto como con Apple CarPlay de forma inalámbrica. Por no hablar de las bondades como la navegación con información del tráfico en tiempo real, de la visión aumentada o del asistente personal inteligente, BMW Intelligent Personal Assistant.

Otra cosa que llama la atención en el BMW Serie 2 Active Tourer es el reposabrazos flotante con panel de control integrado. Es una solución que ayuda a reducir el número de botones físicos y que libera espacio de la consola central. Integra el selector de marchas y en su parte inferior deja un hueco para el smartphone u otros objetos de tamaño reducido. Hay bastantes huecos portaobjetos en este monovolumen, con unas guanteras aprovechables.

Al ser el único monovolumen premium los acabados son excelentes y los ajustes y materiales a otro nivel comparado con las marcas generalistas.

Estamos delante de un cinco plazas en toda regla, con plazas muy amplias y cómodas, acceso fenomenal y habitabilidad muy conseguida.

Las delanteras cuentan con unos nuevos asientos deportivos con refuerzos laterales, que también tienen reglajes eléctricos y función masaje.

La segunda fila la forman tres asientos individuales. La banqueta cuenta con desplazamiento longitudinal de 13 cm, por lo que el espacio puede variar notablemente en función de las necesidades. El hueco es generoso tanto para las piernas como para la cabeza, aunque es cierto que la plaza central se quedará más justa por anchura.

El maletero del BMW Serie 2 Active Tourer ofrece una capacidad de carga de 415 litros. Podemos ganar otros 90 litros poniendo los asientos traseros en su posición más adelantada.

Bajo el piso hay un hueco que es bastante aprovechable. Otro aspecto que hay que mencionar es que los asientos traseros pueden abatirse en tres partes (40:20:40) y que dejan una superficie casi plana que alcanza los 1.405 litros en el 220i.

El motor de esta versión 220i equipa un bloque tricilíndrico de 1,5 litros y 136 cv, asociado a un sistema Mild Hybrid de 48V para ganarse la etiqueta ECO de la DGT y alcanza una potencia de 170 CV (19 CV del sistema eléctrico).

El cambio es una transmisión automática Steptronic, de doble embrague y siete velocidades, su funcionamiento es sensacional e imperceptible.

El consumo es realmente bueno, en nuestro caso nos consumió tan solo 5,4 litros a los 100 kilómetros, gracias al buen hacer del sistema híbrido que permite un uso a vela constante.

Las prestaciones son buenas, personalmente no creo que en un coche de este estilo necesitemos más, tenemos una velocidad punta de 221 Km/h y pasa de 0 a 100 KM/h en 8,1 segundos.

En marcha es un coche suave y silencioso, corre si le pides marcha pero la verdad es que es un vehículo que anima a viajar a devorar kilómetros, vas cómodo en un ambiente relajado y con un comportamiento intachable.

Con los BMW MyModes que vienen de serie podemos elegir entre los modos Personal, Sport y Efficient. Hay algunas diferencias obvias entre unos y otros, destacando la forma en estirar el cambio o el sonido simulado en el modo deportivo, además de la dirección más blanda o de la respuesta menos marcada en el modo eficiente.

En movimiento es igual que un turismo, va de cine, aplomado, rápido, estable y seguro, sea por autopista o por carreteras viradas es un coche fácil de llevar incluso a velocidades nada legales, además el gran trabajo de la marca con la suspensión, permite que contenga los movimientos de la carrocería, pero también filtre excelentemente bien las irregularidades del firme.

En ciudad sus cotas contenidas nos permiten un buen hacer ratoneando y estacionando, además es un coche ágil.

Valoración Final

Os seré sincero, este es de los pocos coches que me quedaría para mi día a día, en un año más o menos probamos unos 60 coches, algunos bonitos pero que no son prácticos, otros que no nos gustan, algunos que a pesar de ir bien no acaban de convencernos y en este caso un coche que no le encontramos problemas, ya que además su precio de 39.000 euros nos parece muy equilibrado. Este BMW 220i Active Tourer tiene etiqueta Cero de la DGT, es cómodo y económico de uso, va muy bien equipado, ofrece un gran compromiso entre tamaño y habitabilidad y se conduce muy bien, sin duda una compra maestra.