Probamos el Hyundai Santa Fe Híbrido enchufable
La quinta generación del SUV grande de Hyundai no tiene nada que ver con sus antecesores, ahora es mucho más cuadrado, grande y no está disponible con motores diesel.
El nuevo Hyundai Santa Fe nos recuerda a un todo terreno americano, grande por fuera (aunque no cuando cogemos el metro, ya que se queda en unos correctos 4,83 metros de largo, eso si es muy ancho y alto), inmenso por dentro, diseño muy cuadrado, pero a diferencia de los modelos del otro lado del atlántico, sus materiales, acabados y sobretodo motorizaciones son de calidad y última hornada.
En nuestro mercado el Santa Fe solo está disponible en configuración de siete plazas (las dos de la tercera fila pensadas para niños). Si hay solo 5 plazas ocupadas, el maletero es de nada menos que 621 litros.
Por supuesto que las dos filas de asientos de atrás se pueden plegar dejando un espacio de carga enorme al que accedemos por el gran portón trasero.
El nuevo Santa Fe tiene un diseño rompedor que personalmente no me enamora, pero visto las miradas que ha generado puede que mi opinión no sea más que eso, una opinión personal. Con un diseño de líneas rectas y simples se beneficia claramente el espacio interior.
Sus faros diurnos dibujan una forma de H en el frontal, y también en el interior, con un embellecedor frente al pasajero delantero. Detrás es muy vertical, con mucha chapa a la vista.
El salpicadero también es muy cuadrado con dos pantallas de 12,3″ unidas formando una semicurva. El módulo de climatización se opera con botones táctiles y acoge también el pulsador para seleccionar los modos de conducción o el control de descenso.
Las plazas traseras son dignas de un primer ministro con un espacio enorme y un confort excelso. El acceso a la tercera fila es fácil, aunque no del todo cómodo para un adulto.
Cómo ya hemos comentado, este Santa Fe ya no está disponible con motores diesel, hecho que nos hace dudar de si se venderá tan bien cómo las generaciones anteriores.
Esta versión híbrida enchufable dispone de una batería de 13,8 kWh y un motor eléctrico de 98 CV, asociado a un motor gasolina turboalimentado de 1,6 litros produce 160 caballos de potencia y 264 Nm de par, acoplado a una transmisión automática e-CVT de 6 velocidades y tracción total, que ofrece una potencia máxima conjunta de 253 caballos, ofreciendo además una autonomía eléctrica entre 54 y 69 kilómetros. En nuestro caso no superamos los 40 kilómetros en modo solo eléctrico.
Disponemos de tres modos de conducción disponibles (Eco, Sport e Individual) y otros tres para diferentes terrenos: nieve, arena y barro.
El consumo durante nuestro test estuvo por debajo del homologado, 6,4 litros, entendemos que dependiendo del uso, será menor o mayor.
El Santa Fe acelera con ganas con un paso de 0 a 100 de 9,1 segundos, nada mal para 2,2 toneladas de peso!
En marcha es un coche extremadamente cómodo y bastante silencioso, aunque cuando aumentamos la velocidad aparecen ruidos parásitos del aire, lógicos si recordamos sus poco redondeadas formas.. La hibridación nos permite circular muchos kilómetros sin gastar gasolina, tiene un funcionamiento muy fino y silencioso, aunque cuando le exigimos, si se percibe el ruido del motor térmico, aunque nunca llega a molestar. En carretera va mucho rato por inercia o en modo eléctrico. El motor de gasolina solo arranca cuando necesitamos potencia (recuerda que el motor eléctrico tiene tan solo 98 caballos) y para cargar la batería.
La suspensión es suave y eso se nota en zonas viradas, dónde sin perder nunca la compostura, si inclina más de lo deseado y no anima a correr.
La suspensión de tarado blando sí que es muy de agradecer fuera del asfalto, dónde filtra bastante bien las irregularidades del terreno y su tracción total avanza sin problema, con una capacidad de tracción sorprendente. No es un coche para subir trileras, pero para caminos en buen estado incluso algo rotos, va muy bien.
En ciudad es un tanque, la visibilidad es mala y es enorme, a la hora de aparcar, suerte de las ayudas de estacionamiento y cámaras, sino sería una pesadilla.
Valoración Final.
Esta versión híbrida enchufable está disponible desde 60.000 euros, un precio ya alto para la inmensa mayoría y que está cerca de algunos modelos premium, que por supuesto van menos equipados, pero que tienen un mercado de reventa mejor. El nuevo Santa Fe es una incógnita si va a cuajar en un mercado cómo el nuestro, pero estoy seguro de que en otros sí que lo hará.