Probamos el Seat Ibiza 1.0 TSI 110 CV 6v
Nuestro querido Ibiza vuelve a pasar por nuestras manos y estamos orgullosos de decir que la marca española no ha sucumbido de momento a tecnologías de difícil pronunciación ni ha buscado un aburguesamiento del Ibiza, sigue siendo ese coche fácil y divertido de conducir, que desde 1984 nos acompaña y que esperemos que siga muchos más así.
Asequible, sencillo, divertido y cómodo, nuestro Ibiza ha ido evolucionando generación tras generación, pero sin perder su personalidad, no cómo otros modelos que mantienen el nombre y simplemente se trata de un coche diferente. El Ibiza actual es un coche juvenil, con unos acabados al nivel de sus competidores más duros y una gama de motores bastante extensa y sobretodo atractiva.
Esta quinta generación lleva ya unos años en el mercado y Seat ha aprovechado para hacerle un restyling con sutiles cambios estéticos en el exterior, pero mucho más notables en el habitáculo, especialmente en el apartado de tecnología y conectividad.
Entre las novedades destacan la iluminación LED de serie y Full LED en los acabados superiores, las nuevas llantas y los logos SEAT, con un acabado bitono. Su trasera también se diferencia del antiguo ya que ahora lleva manuscrito el nombre del modelo.
Sigue siendo un modelo de tamaño medio, con 4,06 metros de largo y 1.78 metros de anchura.
Los mayores cambios se presentan en el habitáculo con un interior bastante más tecnológico, ya que el cuadro de instrumentos es ahora digital de 10,25 pulgadas con varias opciones de personalización y visualización.
La pantalla central del salpicadero también se ha sustituido por una nueva pantalla flotante de 9,2 pulgadas en la unidad probada. Gracias a esta posición más elevada mejora su visibilidad y reduce las posibles distracciones además incluye Apple CarPlay y Android Auto.
La pantalla aglutina la mayoría de las funciones y menús pero gracias a dios los mandos del climatizador se mantienen independientes, mucho más cómodos a la hora de conducir, ya que no debemos trastear entre pantallas…
Se han mejorado los materiales utilizados para el salpicadero, volante y tapizados, con una buena calidad percibida. .
La habitabilidad se mantiene, sin ser un coche amplio, si que está entre los mejores de su tamaño, además los asientos siguen ofreciendo un elevado confort y sujeción delante y un confort aceptable detrás.
El maletero mantiene los 355 litros de la versión predecesora, siendo un volumen muy bueno teniendo en cuenta el tamaño total del coche.
La unidad probada montaba el propulsor 1.0 TSI, un tricilíndrico alimentado por un turbo que desarrolla 110 CV a 5.500 rpm y 200 Nm de par entre 2.000 y 3.000 vueltas, es un motor alegre, que asociado con el cambio manual de 6 relaciones nos regala una brillante agilidad y respuesta, sin grandes aspiraciones dinámicas, pero es un coche divertido con un motor que responde muy bien.
El consumo es algo alto, en nuestro caso 6,4 litros, lejos del homologado, pero suponemos que se trata porqué la unidad probada tenía pocos kilómetros.
Las prestaciones cómo hemos comentado son destacables por la potencia del motor ya que pasa de 0 a 100 en 10,2 segundos y tiene una punta de 195 km/h.
En movimiento es dónde sabemos que estamos en un Ibiza, es un coche ágil que transmite ligereza y que nos da una sensación de seguridad al volante que otros no hacen.
A pesar de ser tricilíndrico no es un coche que vibre en exceso, si acaso al ralentí. En marcha funciona con alegría y nos permite ritmos movidos en zonas viradas, dónde el conjunto chasis/ suspensiones nos permiten divertirnos al volante.
En Autopista, es un buen viajante, a velocidades legales va bien, apoyado por un cambio desahogado y una dirección precisa.
Entre el tráfico de la urbe, es sencillo de circular y maniobrar, apoyándonos en los sensores de parking y cámara posterior.
Valoración Final
El acabado probado ronda los 19.000 euros, aunque con descuentos, promociones,.. nos lo podemos llevar por un precio de chollo. Este Ibiza es un coche polivalente, bien equipado y que por tamaño no tiene miedo de la ciudad ni de los viajes,.. nos ha gustado volver a conducir la nueva generación del Ibiza.