Probamos el Skoda Kamiq G-TEC
Los híbridos de Gas Natural y Gasolina llegan al segmento de los SUV urbano de la mano de Skoda y su nuevo Kamiq, una propuesta que une economía y protección al medio ambiente.
El Gas Natural es a día de hoy la opción más ecológica de todos los carburantes fósiles y la más económica. El GLP es más barato, pero el GNC optiene un rendimiento termodinámico mucho más eficaz, o lo que es lo mismo, gasta ostensiblemente menos que el mismo motor con GLP o gasolina, en este caso el consumo ha rondado los excelentes 3,3 kilos de gas, que con los 13,8 kg de depósito nos dan algo más de 400 kilómetros de autonomía con este carburante, a lo que hay que sumar los 140-150 km que nos permiten los 9 litros de gasolina que tenemos para cuando se acaba el gas.
A este bajo consumo hay que sumar que el GNC sale por 0,85 euros el kilo, casi un 30% más económico que la gasolina y contaminando mucho menos, por eso dispone del distintivo ECO de la DGT.
El motor TGI ha sido especialmente modificado para funcionar con gas, se trata del 1.0 TGI de tres cilindros. Un bloque que deriva del 1.0 TSI que todos conocemos pero que ha sido pertinentemente modificado para funcionar con GNC. Cuenta con distintas levas de entrada y escape, un cabezal de cilindro revisado, una nueva toma de inducción, un regulador electrónico de la presión del gas, toberas de inyección especiales adaptadas para funcionar con GNC y válvulas de escape más resistentes a las altas temperaturas.
En total genera 90 CV (95 CV en el TSI) entre las 4.000 y las 5.500 rpm así como un par máximo de 160 Nm entre las 1.800 y las 3.800 vueltas, se asocia a una transmisión manual de seis relaciones.
Es un motor que no oculta por su naturaleza tricilíndrica, con el traqueteo habitual en estas mecánicas. No es un motor dinámico, más bien algo perezoso y hay que llevarlo con marchas cortas a la hora de recuperar, adelantar o hacer cambios de ritmo, se nota que está algo falto de fuerza a bajas revoluciones, pero en ciudad y a velocidad constante es un coche suave y muy frugal.
Las prestaciones son tranquilas, ya que se ha primado el ahorro de combustible a la respuesta del motor, pero tampoco son para llorar, ya que pasa de 0 a 100 Km/h en 12,5 segundos, cifra que está por encima de algunos modelos de potencia similar.
La principal virtud de este modelo es el ahorro económico, pero penalizamos algo en agrado de uso y prestaciones, pero pensamos que en muchas ocasiones, es un precio razonable a pagar.
La parte de diseño exterior de Kamiq G-TEC no aporta diferencias con respecto a cualquier otro Kamiq de la gama. Únicamente la colocación del logo G-TEC en el portón y de la etiqueta ECO en el parabrisas delantero, nos desvelarán su naturaleza eficiente.
Este Kamiq es un coche de imagen musculosa y atractiva, con unas dimensiones respetables, ya que mide 4,24 metros de largo, 1,79 de ancho y 1,55 metros de alto.
En el interior sucede lo mismo que con el exterior, apenas se nota el cambio respecto a sus hermanos de otros combustibles a excepción del segundo medidor de combustible destinado al GNC y que se coloca en la esfera izquierda, el resto se mantiene idéntico. El ordenador de a bordo también suma pantallas específicas para informarnos del gasto y la autonomía resultantes de utilizar tanto el GNC o como la gasolina así como una específica que nos alerta de la calidad del gas repostado.
Los Kamiq es un modelo con una correcta habitabilidad, ergonomía conseguida y una buena carga tecnológica. La pantalla central táctil de manejo sea bastante intuitivo. También agradecemos que se mantengan los mandos de la climatización analógicos.
La calidad de construcción es media con materiales duros y que ofrecen una calidad visual algo inferior a otros modelos del segmento, pero que la experiencia nos dice que serán duraderos. La habitabilidad en líneas generales es buena con una zona trasera apta para dos adultos de estatura media, gracias en parte, al amplio hueco disponible para las piernas.
La única perdida remarcable que tiene esta versión respecto a la versión gasolina son los 120 litros de maletero que perdemos, quedándose en 280 litros, que no están mal, y que podemos ampliar plegando los asientos traseros en una proporción 40/60.
En marcha prima el confort sin perder de vista la seguridad, no es un coche que tenga un paso por curva deportivo, ni su motor se lo permite, pero se muestra seguro y eficaz, sin buscar los límites de su bastidor.
En Autopista, a velocidades legales es un coche que va francamente bien, manteniendo bien la velocidad y con un aplomo destacado, solo en subidas empinadas nos veremos obligados a bajar de marcha.
Skoda últimamente está equipando mucho mejor a sus modelos, por ejemplo este modelo incluía una lista que hasta hace bien poco ningún urbano podía igualar.. como las llantas de 17 pulgadas, el climatizador automático, la pantalla central táctil de 8 pulgadas con función Smart Link y sincronización móvil mediante Apple CarPlay o Android Auto, control de velocidad de crucero, asistente de mantenimiento en el carril, asistente de colisión frontal. Detector de fatiga, sensores delanteros y traseros de aparcamiento, faros LED, cristales traseros oscurecidos…
Valoración Final.
Estamos delante de un modelo bonito y bien equipado, que ofrece una economía de uso sin igual pero que le falta algo de agrado de uso, sin embargo es una opción excelente cómo coche de a diario por su bajo consumo y bajas emisiones. Está disponible desde 16.600 euros descontando las ayudas gubernamentales, un precio muy competitivo para este híbrido GNC/Gasolina.