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Todos los amantes de las dos ruedas quieren una moto trail.

El mundo de las motos trail vive uno de sus momentos más dulces desde que la mítica categoría dio sus primeros pasos. Este tipo de motos está caracterizado por la polivalencia y versatilidad de los modelos que lo componen. Tanto prácticos en el día a día, como ideales para maravillosas experiencias sobre asfalto y todoterreno estos modelos están en auge.

Una forma genial de empezar a disfrutar la primera aventura con este tipo de motos es hacerse con un modelo asequible pero versátil y duradero. De hecho, la gran cantidad de modelos que podemos encontrar hoy en día incluye diferentes volúmenes, tamaños, pesos y, por supuesto, incluso están dedicados al off-road o al asfalto.

Por eso, una de las mejores opciones es adquirir una Kawasaki, una marca de larga reputación con una buena relación calidad-precio. Las motos de este conocido fabricante apenas pisan el taller y ofrecen unas prestaciones por encima de la media. Desde la gama Adventure Tourer o cualquiera de sus off-road, esta marca tiene unos modelos únicos.

A qué se debe su éxito

El éxito de las motos trail se debe principalmente a que cada vez a más aficionados a las dos ruedas salen a la carretera en busca de nuevas aventuras y experiencias. Por eso hay cada vez más consumidores con la recién lanzada matrícula A2, que necesitan una moto ligera y fácil de manejar. Hay muchos modelos por debajo de los 7000€, en una amplia gama desde las 300cc hasta las 650cc. Todos ellos con garantía de calidad y muy buenos resultados.

De hecho, la incursión de Kawasaki en el mundo todoterreno fue de la mano de su liviana Versys-X 300, una A2 versátil y simple impulsada por el famoso motor bicilíndrico en línea refrigerado por líquido. La culata de esta máquina tiene cuatro válvulas por cilindro. Un mecanismo muy refinado que produce unos buenos 40 CV a 11.500 rpm y 25,7 Nm de par a 10.000 rpm. El cuadro con columna central fue desarrollado específicamente para este modelo y se unió a una horquilla convencional con puntales de 41 mm. Añade un amortiguador con sistema Uni-Track y tanques de combustible con un diámetro de 130 y 140 mm. Viajar solo.

El frenado está delegado a discos de 290 y 220 mm en cada eje respectivamente, y las pinzas que los guían son de dos pistones en el primero, uno en el segundo. También hay ABS para evitar atascos de papel accidentales. En cuanto a las llantas, las delanteras son de 19 pulgadas de radios y las traseras de 17 pulgadas con un peso total de 175 kg, lo que lo convierte en una de las opciones más ligeras de la categoría.

El equipamiento de serie quizá  no es su mejor arma, e incluso sus ópticas frontales no son LED.  Sin embargo, lo mejor es su salpicadero con display LCD y tacómetro de aguja, muy cómodo de la forma más clásica. Haciendo un resumen, este modelo sale por 5.699 €, ofreciendo un  motor Bicilíndrico LC DOHC 8V y 296 cc. Potencia de 40 CV a 11.500 rpm y altura asiento: 845 mm, con un peso en orden de marcha de 175 kg.

Pero este es solo un ejemplo de lo que Kawasaki puede ofrecer a los aficionados al trail. Además, el programa de garantía ampliada K-CARE WarrantyPlus de Kawasaki brinda todo lo que se necesita para garantizar que la inversión valga la pena. Se trata de un servicio prolongado y confiable, una forma sencilla y sin preocupaciones de mantenerse en movimiento sin preocupaciones y que aporta valor al modelo que se escoja de esta marca.