Probamos el Mitsubishi Space Star 120 MPI CVT
Mitsubishi en España es básicamente conocido por sus Todo Terreno, Pick-Ups y últimamente por los coches híbridos, pero en el resto del mundo la marca de los tres diamantes tiene una merecida fama de fabricante de utilitarios pequeños con motor gasolina, que es dónde entra este Space Star que hoy nos visita, se trata de un urbano con un equipamiento completo, aceptable habitabilidad y un precio de derribo ya que es de los pocos coches que se pueden comprar por menos de 12.000 €.
Fabricado en Tailandia, el Space Star de Mitsubishi, aquí no goza de la buena cuota de mercado que si tiene en otros países, pero es sin duda una opción muy inteligente frente a afamados urbanos europeos que se cotizan muy alto en las listas de precios.
La unidad probada de Mitsubishi Space Star es el 120 MPI Kaiteki con la nueva caja de cambios automática de tipo CVT. Una caja de cambio que obliga al motor a subir de vueltas para andar alegre, pero que es cómoda y sobretodo no penaliza los consumos, que se han quedado en unos sobresalientes 5,4 litros a los 100 kilómetros en recorrido mixto.
El motor 1,2 litros de 71 caballos se muestra suave y voluntarioso, puede mantener bien las velocidades legales y el cambio a pesar de ser algo ruidoso es eficaz y permite moverse con soltura.
No es un deportivo, tarda 14 segundos en pasar de 0 a 100 Km/h, pero tampoco se le va a pedir que haga ningún rally.
No se trata de un modelo a la última pero va bien equipado, está bien acabado y se ve duradero, fama que precede a la marca Nipona.
Con el nivel de acabado Kaiteki se incluyen de serie las llantas de aleación de 15 pulgadas, climatizador, cristales tintados y varios detalles decorativos que le sientan bastante bien.
Los pilotos traseros cuentan con tecnología LED pero los faros principales delanteros solo poseen bombillas halógenas.
El interior es sencillo y robusto, sin ningún tipo de concesión tecnológica que hubiera multiplicado su precio.
La instrumentación es sencilla y fácil de leer e incluye incluso un ordenador de a bordo bastante completo, aunque para pasar de pantalla debemos pulsar un botón situado entre el cuadro de relojes y el volante, cosa que lo hace algo incómodo.
El nivel de acabado Kaiteki incluye de serie el climatizador automático. Tiene una pantalla digital de sencilla lectura y los botones resultan intuitivos.
Disponemos de un sencillo pero completo sistema multimedia con pantalla táctil de siete pulgadas. Para ser un sistema doble DIN clásico está bastante bien integrada, se puede controlar desde el volante y además cuenta con lo básico en conectividad como son el Apple CarPlay, Android Auto, bluetooth, radio DAB y puerto USB. La calidad de sonido es correcta, sin más.
Repartidos por todo el interior hay varios huecos porta-objetos que resultan bastante útiles e incluso sorprende para ser un coche tan pequeño. Las bolsas de las puertas son utilizables y en la consola entre los asientos hay varios lugares pequeños.
La calidad de los materiales es correcta, con plásticos duros recubriendo la mayoría de superficies. Para conseguir un efecto más vistoso se hace uso del plástico negro brillante e inserciones de tela en las puertas. El tapizado de los asientos en este nivel Kaiteki sí resulta atractivo combinando ecopiel con tela de agradable diseño.
La habitabilidad es bastante buena teniendo en cuenta sus pequeñas dimensiones exteriores de este urbanita que es capaz de llevar a cuatro ocupantes sin problemas, y además permitirse el lujo de un maletero bastante capaz de 209 litros.
En las plazas delanteras la sensación de espacio está limitada por la anchura, un tanto justa.
En las plazas traseras, disponemos de una buen acceso a través de unas puertas de buena apertura. El espacio para las piernas y la altura son buenas, no así el ancho que limita la banqueta casi a dos ocupantes.
En marcha es un urbano ágil, cómodo y sencillo de conducir, incluso en tramos de curvas sorprende la seguridad que transmite, su suspensión no es nada elaborada pero realiza su función de filtrar las irregularidades sin problema.
Su hábitat preferido es la ciudad, pero tampoco no se amilana cuando salimos por autopista, es un coche urbano que permite un uso polivalente sin excesos.
En la city es una gozada para aparcar y callejear, además con el cambio automático todo es incluso más fácil.
Valoración Final
Tras haber probado este Space Star en versión automática y su hermano de cambio manual, me costaría decidirme por uno u otro, seguramente sería el presupuesto el que me haría decantar por la versión manual, pero teniendo en cuenta que este es el automáticos de características similares más económico del mercado, la elección es difícil. Si os encaja, es un coche sencillo, robusto y fiable, que os llevará de un sitio a otro sin dolores de cabeza ni un coste exagerado.