Mientras el <strong>Mundial de Rallyes (WRC) sigue representando un quebradero de cabeza </strong>para el futuro en la FIA y los órganos de gestión del deporte, el campeonato trata de volver a ser lo que fue. En los 70, 80 y 90 era una unión de marcas, talento y épica. Recuperar la esencia es imposible… aunque una última decisión de la normativa invita a pensar de forma optimista. <strong>Regresará el Rally Safari al estilo más auténtico: coches preparados para la batalla como pasaba en los tiempos dorados de los rallyes.</strong> Habrá especificaciones, con el ‘<em>snorkel</em>’ como detalle más novedoso.

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