La firma americana juega en casa y son varias las novedades que ha preparado para el Salón de Detroit 2015 (Ford Mustang Shelby GT350), pero entre todas ellas brilla con luz propia la nueva generación del mítico Ford GT. Este superdeportivo toma el relevo del Ford GT que se fabricó entre 2005 y 2006. Ambos son herederos del Ford GT 40, un coche de leyenda que en 1966 fue primero, segundo y tercero en las 24 Horas de Le Mans. El nuevo Ford GT llegará a las carreteras en 2016 a tiempo de celebrar el 50 aniversario de esa gran victoria de Ford en la competición.

El Ford GT 2016 monta el nuevo motor EcoBoost V6 biturbo de 3,5 litros ubicado en posición central y asociado a una caja de cambios de doble embrague y siete velocidades. Además, cuenta con tracción trasera y se trata del propulsor EcoBoost fabricado en serie más potente hasta la fecha. De momento, la marca no ha facilitado datos sobre sus prestaciones, pero a buen seguro serán impresionantes. “El GT es la definición definitiva de un supercoche para entusiastas”, ha asegurado Raj Nair, vicepresidente de Desarrollo Global de Producto de Ford.

Además, el nuevo Ford GT hace un amplio uso de materiales ligeros, incluidos fibra de carbono y aluminio, lo que permite reducir su peso y aumentar su rendimiento al mejorar la relación peso/potencia. La utilización de este tipo de materiales ligeros y el empleo de las últimas tecnologías, tanto en desarrollo como en fabricación, hacen que el Ford GT se una al selecto grupo de los denominados superdeportivos.

Según los responsables de la marca: “La eficiencia aerodinámica es el corazón del diseño del GT”. De esta manera, cada curva y forma han sido diseñadas con el propósito de reducir al máximo la resistencia aerodinámica y optimizar la fuerza de adherencia. Además, cuenta también con componentes aerodinámicos activos para mejorar el frenado, la dirección y la estabilidad. Prueba de ello, es la inclusión de un spoiler trasero activo para controlar la velocidad y las órdenes del conductor que ajusta su altura y ángulo de inclinación dependiendo de las condiciones.

Otra de las características distintivas del Ford GT es el acceso a la cabina de dos plazas a través de puertas de ala de gaviota y los asientos integrados directamente en el habitáculo de fibra de carbono. Esta configuración permite el conductor una conexión directa con el chasis para captar todas y cada una de las sensaciones que ofrezca el vehículo. A esto se añade: llantas de 20 pulgadas, discos de freno cerámicos y un volante estilo F1 que integra todos los controles de conducción necesarios.

Por último, el Ford GT contará con SYNC 3, la versión más novedosa del sistema avanzado de conectividad de Ford, y un panel de instrumentos totalmente digital.