La negativa de Ferrari a renovarle y el poco interés del resto de los equipos para hacerse con sus servicios, queda libre el próximo año, podrían acabar con el alemán fuera de la parrilla de la Fórmula 1.

Sebastian Vettel pasa por el seguramente peor momento desde que es piloto de Fórmula 1. Su bajo rendimiento en la última temporada en Ferrari, donde se vio claramente superado por el joven Charles Leclerc, y el hecho de no querer aceptarlo, le han hecho perder mucha credibilidad dentro del paddock.

Ahora mismo, su situación es muy peliaguda para el 2021. Queda libre con los italianos, que lejos de intentar renovarle optaron por firmar a Carlos Sainz y darle continuidad a su proyecto con el monegasco Leclerc. Sin sitio allí, parecía que el movimiento del español a Ferrari podría abrirle las puertas de McLaren, que sin embargo se apresuró para contratar a Daniel Ricciardo, de Renault, asiento ya ocupado con el regreso de Fernando Alonso a la escudería francesa.

Se le van cerrando las puertas

Todo este encaje de bolillos que se ha movido en apenas unas semanas, hacen que Vettel salga y entre Alonso, con Sainz y Ricciardo cambiando de equipos, aunque todavía hay escuderías que podrían intentar contratar al alemán, cuya cotización está claramente a la baja.

Red Bull ni se lo ha pensado, y eso que con el germano fue la última vez que ganó un campeonato del mundo, mientras que Mercedes, a pesar de la tentativa, está muy tranquilo con su binomio formado por Lewis Hamilton y Valtteri Bottas, y por ahora se centran en ganar el Mundial 2020 para el que son los dos máximos candidatos en las apuestas por internet.

De esta manera, y salvo que aparezca una escudería ya de nivel medio o bajo como Williams o Racing Point a última hora intentándolo, todo apunta a que Vettel, todo un tetracampeón del mundo, no tendrá coche para el Mundial 2021, lo que no deja de significar que su crédito se ha devaluado hasta la saciedad en este deporte.

Sus malos resultados arrojan dudas

A sus 33 años, el de Heppenheim acumula seis campañas consecutivas sin ganar el título, esta será la séptima casi total seguridad. Ganó sus cuatro entorchados en Red Bull de manera consecutiva entre el 2010 y el 2013, pero desde entonces apenas ha podido competir sobre todo con el poderío de Mercedes y Hamilton.

Además, su última temporada en Ferrari le hizo perder los estribos en diversas ocasiones al verse superado por su compañero Leclerc, acabando en la quinta posición un Mundial en el que al menos tercero podría haber sido. Una imagen lastrada que sigue enseñando en el comienzo de la actual campaña, en la que podría haber dado un golpe encima de la mesa y haber demostrado que quizás Ferrari se equivocaba al prescindir de sus servicios.
En resumen, Vettel cada vez parece más fuera que dentro de la Fórmula 1, con un posible regreso al estilo Alonso de aquí en algún tiempo, pero sin la confianza, todo sea dicho, con la que el asturiano se fue en su día, considerado como uno de los mejores pilotos del momento, al contrario de lo que le ocurre al alemán en estos momentos.