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Probamos el BMW X5 xDrive50e

Probamos el BMW X5 xDrive50e

Con casi 500 CV y hasta 110 km en modo eléctrico, este X5 de BMW no es un modelo cualquiera, es un auténtico sueño húmedo para algunos.

Gracias a la gran autonomía eléctrica, este BMW cuenta con la etiqueta 0 emisiones de la DGT, aunque sería discutible si estamos delante de un coche ecológico si no cargamos regularmente su batería.

La unidad de pruebas equipaba el paquete opcional M Sport, con elementos en negro brillo y un acertado paquete aerodinámico, entre otras mejoras. La doble salida de escape se oculta en embellecedores trapezoidales y los faros Matrix LED de espectacular rendimiento y visibilidad.

Este gran SUV ahora se estira hasta los 4,94 metros, alcanza los 2 de ancho, 1,76 metros de alto, y cuenta con una amplia batalla de 2,98 metros. Pese a esas cotas, no hay tres plazas individuales traseras, aunque la del centro es más cómoda que en otros todocaminos más pequeños.

En su interior la calidad es sobresaliente, su ergonomía y diseño también están muy trabajados, aunque personalmente me gustaría que su sistema de menús fuera más sencillo e intuitivo.

El iDrive nos ayuda a movernos entre los múltiples menús de su sistema de infoentretenimiento que se visualiza en la pantalla central táctil de 14,9 pulgadas.

Dispone de un pequeño mando de la transmisión sencillo y fácil de usar.

Todas las plazas son cómodas y espaciosas, los tapizados transmiten calidad y calidez, y las cotas de habitabilidad permiten que cualquiera viaje con elevado confort. Los asientos de cuero nos abrazan y nos aportan un enorme confort incluso tras horas de viaje.

Respecto al maletero, la integración de la batería lo hace perder 150 litros, quedándose en 500, una capacidad que podría parecer justa por el tamaño del vehículo, pero si aprovechamos hasta el techo cabe mucho equipaje.

El puerto de carga se encuentra justo detrás del paso de rueda delantero izquierdo. Tiene una batería de 25,7 kWh de capacidad útil, que puede cargarse en 4 horas y 30 minutos a una potencia de 7,4 kW.

El sistema híbrido del BMW X5 xDrive50e lo conforman dos motores en posición delantera longitudinal. Un gasolina de seis cilindros en línea y 3,0 litros, turboalimentado, que entrega 313 CV entre 5.000 y 6.500 rpm, y 470 Nm constantes entre las 1.750 y las 4.700 vueltas y un motor eléctrico de 197 CV. Las cifras combinadas son 489 CV y 700 Nm.

La fuerza se transmite mediante la transmisión automática con convertidor de par Steptronic, con ocho velocidades, y la tracción total xDrive, que envía par a las ruedas delanteras en caso necesario.

Las prestaciones son de infarto, bajando de 5 segundos en la aceleración de 0 a 100 (4,8) y con una velocidad máxima autolimitada a 250 km/h.

El consumo en modo híbrido está en torno a los 8 o 9 litros, con una autonomía real superior a los 700 kilómetros.

En marcha es imparable, con unas transiciones imperceptibles entre ambos motores, una cualidad que se suma al perfecto aislamiento del interior, lo que regala a sus ocupantes una calidad y confort de marcha al alcance de muy pocos coches.

Tenemos un sin fin de ayudas electrónicas a nuestra disposición, como la suspensión neumática adaptativa, el tren trasero direccional que se ofrece opcionalmente, pero que nos permite un paso por curva estable y preciso.

Por supuesto, hay numerosos programas de conducción disponibles: Electric, Hybrid, Hybrid Eco Pro, Sport y Sport Individual, cada uno con un carácter personal. El equipo de frenos M Sport es más potente y dosificable.

El peso del conjunto ayuda a regenerar energía en frenadas y bajadas, lo que nos permite mucho rato de conducción eléctrica.

El equipamiento es superior y se puede mejorar, hay exquisiteces como el climatizador de cuatro zonas, un sistema de sonido de Harman/Kardon con 16 altavoces que es una delicia o el paquete Exclusive, con acabados en cristal, asientos delanteros con masaje o la parrilla iluminada Iconic Glow.

Valoración final

Este BMW X5 xDrive50e sale por 97.700 euros, una cifra al alcance de pocos, pero es un coche que es superior a la inmensa mayoría, sencillamente se pueden contar con los dedos de una mano los coches que nos ofrecen este nivel de comportamiento, confort o lujo.