El Gran Premio de Hungría dejó una polémica situación en Aston Martin. Cerca del final de la carrera, el equipo por radio comunicó a Lance Stroll la decisión de dejar pasar a Fernando Alonso. En este caso el español habría conseguido un punto y el canadiense se habría quedado en undécimo lugar, pero pasó todo lo contrario ya que el compañero del asturiano pasó primero. ¿Es esto una desobediencia?

En un primer momento, desde el equipo le pidieron a Fernando que dejase pasar a su compañero que venía con más ritmo y así poder atacar a Yuki Tsunoda. Al no poder alcanzar al japonés, le comunicaron a Stroll que devolviese la posición al final de la carrera: «Te sugiero que aflojes y dejes pasar a Fernando, está cuatro segundos por detrás». A pesar de este mensaje, el hijo de Lawrence Stroll decidió no cambiar posiciones y cruzó la línea de meta en décima posición, y lejos del coche de RB.

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