El nuevo Cee’d no varía en cuanto a dimensiones, con una longitud de 4,31 metros, algo más de ancho de vías y una altura algo menor.

Las líneas de la carrocería son de trazos limpios y elegantes. El frontal muestra la parrilla de nariz de Tigre y faros con luces LED para iluminación diurna, faros antiniebla por debajo y una gran toma de aire en la parte inferior. En suma, que proporcionan un conjunto agradable a la vista.

Nosotros probamos la versión más potente de la oferta actual, el gasolina 1.4 T-GDi de 140 CV, un nuevo propulsor de cuatro cilindros en línea y 1,4 litros de cilindrada con turbocompresor que desarrolla 140 CV a 6.000 rpm y destaca por la suavidad de funcionamiento, tacto agradable y bajo consumo de combustible.

Sus prestaciones no son muy destacables, pero permite realizar viajes con total comodidad a ritmos elevados si se desea. Homologa 210 km/h de velocidad punta y un paso de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos.

El consumo medio homologado está en 5,8 litros, cifra que no dista mucho de la realidad si practicamos una conducción tranquila, nosotros conseguimos movernos en torno a los 6,5 litros en conducción suave, pero es muy sensible al uso del acelerador y en ciudad o carreteras de montaña se enfila rápidamente por encima de los 8 litros.

El cambio al igual que la dirección ofrecen un tacto firme y suave, muy agradable y con una sensación de tener un buen control del coche. Los frenos cumplen sin problemas.

En movimiento el nuevo compacto de Kia ha evolucionado, con un mejor aplomo en curva y la sensación de que se asienta mejor en la carretera. Los amortiguadores tienen un tarado que ofrece el compromiso justo de comodidad, pero con el toque de dureza suficiente para que la carrocería no se mueva mucho en virajes.

En carretera es dónde hemos observado un mejor comportamiento y seguridad al volante, en Autopista ya tenía un comportamiento muy bueno que ahora mejora con una dirección algo más firme y en ciudad es muy ágil y manejable.

El motor es un turbo light, a pesar de tener 140 caballos, no da la impresión de tenerlos, es más tranquilo que otros modelos de la misma potencia, también los desarrollos largos del cambio ayudan a que sea algo perezoso. No es un gran salto adelante respecto del anterior 1.6 atmosférico de similar potencia.

El interior del coche y el puesto de conducción también han evolucionado, con un salpicadero más ordenado y funcional. En cuadro de relojes se compone de dos relojes analógicos y una pantalla central para ordenador de viaje, navegador, señales de tráfico y los asistentes a la conducción.

En el centro del salpicadero hay una a pantalla táctil flotante de 8 pulgadas que agrupa todas las funciones de entretenimiento, telefonía, música, algunas apps y tiene la posibilidad de montar una red Wi-Fi para que los pasajeros viajen conectados a Internet.

En cuanto a ayudas de conducción también va hacia adelante con elementos como el sistema de mantenimiento de carril que nos avisa con una vibración en el volante de que nos acercamos a la línea de la carretera y corrige ligeramente, el detector de ángulo muerto, control de crucero adaptativo y sistema de frenada de emergencia con detección de peatones.

El espacio para equipajes tiene una capacidad de 395 litros, pudiendo ampliar hasta 1.291 litros si plegamos las plazas traseras.

Valoración Final

El Kia Cee’d es un compacto atractivo y bien acabado, este motor no enamora, pero va muy fino, tiene unas prestaciones aceptables, es silencioso y destaca por su gran suavidad, es un vehículo polivalente sin aspiraciones deportivas pero con un marcado carácter familiar.

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