El Qashqai es a día de hoy uno de los vehículos más exitosos de la historia, ahora llega una nueva generación, pensada para perpetuar este éxito.

La tercera generación del Qashqai se basa en los últimos y futuristas prototipos de la marca Nipona, manteniendo las medidas de la anterior opus, mide 4,42 metros de longitud y 1,85 de anchura, por lo que es más largo y ancho que antes (3,1 y 4,2 cm más, respectivamente). También ha alargado su batalla, que se va hasta 2,67 metros (tres centímetros más), lo que debería favorecer la vida a bordo, sobre todo en las plazas traseras.

El exterior es fruto de un enorme trabajo de diseño, han conseguido un modelo que gana en presencia, con unos faros más afilados que pueden ser LED matriciales, grandes entradas de aire a los lados y una parrilla con lamas que se abren y se cierran en función de las necesidades de refrigeración del motor, lo que ayuda a mejorar la aerodinámica y el consumo.

En el lateral, cuenta con llantas de 20 pulgadas y una línea de cintura ascendente que contrasta con el techo descendente que culmina en una zaga muy angulosa. La carrocería ofrece una visión muy atlética y dinámica, que gira cabezas a nuestro paso.

El interior también evoluciona y se vuelve más tecnológico y de diseño muy conseguido

Las plazas delanteras ganan algo de amplitud y confort con un salpicadero con una gran pantalla de 9 pulgadas y una distribución bastante lógica. La instrumentación es ahora una gran pantalla de 12,3 pulgadas y se ha añadido un enorme head up display de 10,8 pulgadas proyectado directamente sobre el parabrisas.

Las plazas trasera disponen de un excelente acceso con una puerta que abre casi a 90 grados. El espacio es bueno, tanto para las piernas como para la propia cabeza. Disponemos de salidas de aire, buen mullido, …

Disponemos de un maletero de formas regulares y bastante aprovechables de 504 litros (74 litros más que el anterior Qashqai).

La propulsión corre a cargo de un bloque de cuatro cilindros pero con solo 1,3 litros de capacidad y 158 CV. Este motor cuenta con la ayuda de un sistema mild hybrid de 12 voltios, que añade un pequeño motor eléctrico que va unido al cigüeñal y cumple las funciones de motor de arranque, apoyo al motor de gasolina en aceleraciones y recuperación de energía en deceleraciones. Este conjunto va asociado a una caja de cambios manual de seis relaciones y tracción delantera. Ofrece tres programas de conducción ECO, Normal y Sport que modifican la respuesta del motor, acelerador y dirección

Las prestaciones son buenas, pero tampoco excelentes vista la potencia del motor, pasa de 0 a 100 en 9,5 segundos y tiene una velocidad máxima de 206 Km/h.

Respecto al consumo es un motor muy sensible a lo que le pisemos, si vamos tranquilos se mantiene fácilmente por debajo de los 6 litros de consumo medio, pero si corremos algo más ya sube a 7, en conducción rápida se acerca a los 10, que en este caso no es mala cifra.

La nueva plataforma del nuevo Qashqai, le dota de un funcionamiento más sólido y asentado. Sobre todo ha ganado en agilidad, acercándose más que nunca a rivales como un VW Tiguan o un Seat Ateca. La dirección ha mejorado y el chasis, pese a las llantas de 20», no es incómodo.

En marcha es un vehículo cómodo en autopista, con una excelente capacidad para realizar viajes.

La ciudad no se le da nada mal, se maniobra bien y es ágil en el tráfico, estacionar, gracias a las ayudas de estacionamiento está chupado.

En carreteras secundarias, dónde antes no era muy ágil, ha mejorado ostensiblemente, sigue siendo algo más blando de suspensiones que sus competidores, pero transmite seguridad.

Opinión Nissan Qashqai DIG-T 158CV Mild Hybrid 12V 4X2

Con un precio de partida de 29.000 euros en esta versión de 158 caballos nos es un SUV barato pero tampoco se aleja mucho de sus rivales, que cada día tienen tarifas más elevadas, por el resto es un gran coche, fino, suave, silencioso y que responde a la hora de adelantar o para mantener cruceros elevados, es un acierto de Nissan.