El Opel Astra es sin duda uno de los coches que mejor han funcionado comercialmente en España y después de probar su nueva generación con motores de origen PSA, nos atrevemos a decir, que si el precio no se dispara, seguirá siendo uno de los más vendidos en nuestras fronteras.

La actual generación es una evolución del que se presentó en 2016, pero con algunos cambios exteriores y una revolución a nivel de propulsores.

Hoy probamos la versión más potente de la gama (ya no hay versión OPC), un 1,2 litros turboalimentado que desarrolla unos excelentes 145 caballos.

Estéticamente el cambio del compacto alemán apenas se modifica, solo parrilla y parachoques. Eso si la nueva parrilla activa que se abre o cierra automáticamente dependiendo del nivel de refrigeración que necesite su mecánica priorizando refrigeración o aerodinámica. Los bajos del coche han sido completamente carenados para una mejor fluidez del aire, ofreciendo menor resistencia al paso del viento, con lo que mejora la eficiencia y consumos del coche.

Otro punto de evolución es el conocido Opel Eye, la cámara frontal, que no solo detecta las señales y a otros vehículos, ahora también incluye la detección de peatones, pudiendo realizar una frenada de emergencia en caso necesario. También se han añadido nuevas funciones como nuevo control de crucero adaptativo Stop & Go, asistente para el mantenimiento del carril y el asistente de aparcamiento.

Un rasgo distintivo del Astra siempre ha sido su sistema de iluminación avanzado, ahora los faros Intellilux LED, los cuales, a través de la cámara delantera, adaptará la posición de las luces y su intensidad, para así evitar los deslumbramientos a otros conductores.

La tecnología interior también ha sido actualizada, ahora es compatible con Android Auto y Apple CarPlay, y la pantalla táctil crece hasta las 8 pulgadas.

De puertas adentro, los asientos son algo difíciles de regular, pero finalmente se encuentra una buena posición al volante. Estos asientos destacan por la buena sujeción de nuestra espalda e incluyen masaje y climatización.

El volante se puede regular en altura y profundidad tiene un buen tamaño y la opción de que sea calefactable, un detalle muy a destacar en los días fríos de invierno.

La instrumentación posee una pantalla central en la que veremos la velocidad a la que circulamos, navegación y otros datos de interés para el conductor. A su lado disponemos de los indicadores de las revoluciones del motor (izquierda), el nivel de gasolina y la temperatura del aceite.

La habitabilidad trasera es buena para 2 pasajeros, 3 viajarán apretados, el acceso es también bueno.

El maletero tiene una buena boca de carga y una capacidad media de 370 litros, no es de récord, pero está en línea de la competencia.

En marcha sigue siendo un vehículo bastante equilibrado, dónde se consigue un excelente equilibrio entre confort y eficacia.

En autopista el confort interior y el bajo nivel sonoro, invitan a hacer muchos kilómetros.

En carretera, aunque sea virada, el comportamiento es muy sano, sin ser deportivo, tanto la dirección cómo los frenos y los sistemas de ayuda a la conducción hacen que sea un coche fácil de conducir, con unas reacciones nada bruscas al límite.

En ciudad es un coche cómodo y bien aislado, su visibilidad no es perfecta, pero a la hora de estacionar, la cámara de visión trasera es una ayuda impagable.

La motorización 1.2 turbo de 145 CV unida al cambio manual de 6 relaciones de tacto suave y preciso, es un hallazgo, ya que tiene un buen rendimiento y consume cómo un diesel o menos, ya que durante el test hemos obtenido un consumo medio de 5,2 litros a los 100 kilómetros.

En lo referente a la potencia, sus 145 CV dan para mucho, con unas buenas recuperaciones y unas prestaciones destacadas, pasando de 0 a 100 Km/h en 9,4 segundos y alcanzando los 220 Km/h.

El propulsor proporciona una buena respuesta desde tan solo 1.500 rpm, lo que nos permite hacer una conducción adaptada a las necesidades de cada situación.

Valoración Final

El Opel Astra es sin duda uno de los compactos más recomendables de la actualidad, en el caso de este modelo probado, su precio de tarifa es de 26.000 euros aunque hay jugosos descuentos que lo hacen mucho más apetecible. El motor 1.2 nos ha sorprendido por su buena respuesta y bajo consumo, el Astra ya nos gustaba por su polivalencia y acabados, es un coche muy atractivo y lo recomendamos.