Hoy pasa por nuestras manos una especie en extinción, el León coupé de 2 puertas, fórmula que muchas marcas como Citroën o Ford ya han abandonado, pero que personalmente le encuentro un gran encanto.

Este nuevo Cupra es la evolución de la anterior versión Cupra, antes con 265 o 280 caballos y ahora sólo disponible con 290 equinos. Es el modelo de producción más potente de la historia del fabricante español.

El León Cupra 290 equipa un propulsor 2 litros turboalimentado TSI de doble inyección (directa e indirecta) y con distribución variable del árbol de levas. Esta nueva criatura dispone de un sistema de escape reajustado que otorga a su motor deportivo un sonido aún más refinado. El par máximo es de 350 Nm entre 1.700 a 5.800 rpm, lo que permite tener una excelente respuesta a cualquier régimen. El Control de chasis adaptativo junto con el diferencial autoblocante delantero, la dirección de asistencia variable, el Cupra Drive Profile y los faros delanteros Full LED se ocupan de que este León no sea un coche más en la carretera.

Nosotros probamos la versión manual, sin duda nuestra elección, con este cambio disponemos de unas prestaciones muy buenas, pasando de 0 a 100 km/h en 5,7 segundos y una velocidad máxima limitada a 250 km/h.

La caja de cambio es deliciosa, con una precisión suiza y un escalado perfecto. De la dirección no podemos decir otra cosa que es nuestra gran aliada con un tacto y facilidad de uso soberbias.

En cuanto al consumo y pese a las optimistas cifras de consumo de la marca, nosotros en conducción económica no conseguimos bajar de 8,5 litros a los 100 kilómetros y pasamos de las dos cifras en conducción deportiva.

Sus llantas de 1 pulgadas calzadas con neumáticos deportivos y la nueva inscripción Cupra 290 que luce en la parte trasera son su signo de distinción exterior.

De puertas adentro nos encontramos con un completo sistema de infoentretenimiento de última generación, asientos deportivos en Alcántara, volante CUPRA, .. Pero la base es la misma que el resto de la gama, un salpicadero ordenado y de calidad, mucho equipamiento y una habitabilidad más que razonable.

Los asientos pese a ser deportivos no son incómodos, recogen sensacionalmente nuestra espalda y disponen de muchas regulaciones para encontrar la mejor posición para «pilotar» este pepino.

Atrás el acceso es correcto, en la línea de sus competidores, una vez dentro hay espacio para dos adultos cómodamente aunque algo encajados. Teóricamente disponemos de tres plazas, pero es algo discutible.
El maletero con 380 litros permite llevar bastante equipaje, no es de los más grandes, pero gracias a su acceso mediante el portón y que se pueden plegar los asientos traseros, lo hace muy usable.

En cuanto a su comportamiento diremos que sin duda alguna es con el Golf R el mejor compacto deportivo de la actualidad, por facilidad de conducción o pilotaje, pero sobretodo por la manera de transmitir la potencia al suelo, sin pérdidas de tracción ni intrusiones electrónicas, es un coche que enamora si te gusta correr de verdad.

Su patio de recreo sin duda serán las carreteras de montaña, contra más sinuosas mejor, aunque no aprovechemos el caballaje, es igual, el juego de manos y pies entre curva y curva, el negociado de los giros con el cuchillo entre los dedos y sobretodo la sensación de seguridad y control de coche, nos harán disfrutar como niños.

En condiciones normales es un coche muy usable, no pega tirones, es cómo si tuviera dos personalidades, la de señor serio y la de joven alocado. Es un coche perfectamente apto para ir cada día al trabajo, salir de vacaciones,.. Tanto en ciudad como en Autopista destaca por su suavidad y sobretodo por el silencio de marcha.

Valoración Final
Es un auténtico deportivo, con un precio algo picante, 34.000 euros, pero vale cada uno de los céntimos que cuesta, ya que transmite sensaciones a raudales y es totalmente polivalente para un uso total, además recordar que hay una versión de 5 puertas y otra familiar por sin no os encaja el coupé.