El BMW 530d xDrive Touring es elegante y sofisticado, además siempre se ha distinguido por una estética moderna y agresiva, y un comportamiento deportivo.

Si a todo esto le asociamos el delicioso motor turbodiésel de seis cilindros en línea con un compromiso perfecto entre eficiencia y prestaciones. Además disponemos de un suave y rápido cambio automático de 8 velocidades de convertidor de par y la guinda la pone un sistema de tracción total xDrive que cada día es más eficaz.

Este propulsor desarrolla 265 CV y de una entrega de fuerza constante desde bajo régimen. Las vibraciones de este bloque son casi inexistentes, se mueve con gran suavidad y baja sonoridad.

Respecto a las prestaciones, son de escándalo pasando de 0 a 100 km/h en solo 5,4 segundos y con una velocidad máxima de 248 Km/h, casi nada.

Durante la semana de test el consumo ha sido francamente bueno, quedándose en unos 7,3 litros a los 100 Km.

El BMW Serie 5 dispone de un auténtico arsenal tecnológico. En el exterior, los faros adaptativos con tecnología de tipo LED ofrecen una iluminación excelente. Puede circular con las largas puestas en todo momento; el vehículo se encarga por sí solo de alumbrar el interior de la curva y de atenuar una zona determinada cuando viene un coche de frente o nos acercamos a otro usuario de la vía.

En el interior disponemos de cantidad de asistentes y sistemas que nos hacen la vida más fácil, eso si requieren un tiempo de adaptación.

El sistema multimedia de la firma alemana, asociado a una pantalla digital de gran resolución y a un mando de control muy bien diseñado, ahora con manejo táctil y gestual.

La instrumentación es totalmente digital, además disponemos en opción de un enorme sistema de proyección de información en el parabrisas (Head-up display) o el sistema de entretenimiento en las plazas traseras entre otros opcionales.

El nuevo BMW Serie 5 ofrece una buena habitabilidad, tanto delante cómo atrás, dónde sólo el abultado túnel de transmisión impide que vayan tres adultos confortablemente.

Los asientos delanteros son cómodos, muy cómodos y con múltiples reglajes para conseguir una posición al volante perfecta.

En cuanto a maletero, sus 560 litros lo sitúan en buen sitio respecto a sus competidores y sus formas regulares y sobretodo el buen acceso invitan a llenarlos de maletas y marchar de viaje.

En movimiento, no pierde su deportividad típica de la marca, pero gana en confort, gracias tanto a las suspensiones cómo a la lograda insonorización.

La suspensión adaptativa es una maravilla, con solo pulsar un botón, el coche ajusta automáticamente dirección, amortiguación, motor y cambio, en virtud del estilo de conducción de cada cual.

En vías rápidas ofrece viajes sin cansancio y con un aplomo y nivel de seguridad sobresaliente, es el sueño de cualquier viajante.

En zonas viradas tanto en curvas lentas cómo rápidas, se comporta cómo un verdadero deportivo, muy eficaz y seguro, la tracción total nos aporta una gran capacidad de tracción en todas las situaciones.

La tracción total xDrive y el paquete Adaptive Drive; integra el citado control electrónico de suspensión y también barras estabilizadoras activas (ya no trabajan de forma hidráulica, sino eléctrica), encargadas de minimizar los movimientos y balanceos de la carrocería, nos permiten circular velozmente por cualquier sitio y con los neumáticos adecuados, incluso la nieve y el hielo no son enemigo para este gran coche familiar.

Valoración final
Su precio parte de 63.000 euros a lo que podemos adjuntar muchos opcionales, extras,.. pero de todas formas estamos delante de un cochazo que da gusto conducir pero también que te lleven, pocos vehículos permiten disfrutar y al mismo tiempo llevar a la familia sin maltractarla..