Probamos el Volkswagen Amarok V6 TDI Aventura
Ya hace un tiempo el Volkswagen Amarok abandonó los motores de cuatro cilindros y monta un V6 con 163, 204 o 224 CV. Este cambio nos aporta mejores bajos, más suavidad y más par, prestaciones muy importantes para un modelo de esta categoría.
Este motor proviene de Audi, y va asociado a una deliciosa caja de cambios de 8 relaciones.
El par motor es de 550 Nm en esta versión probada de 224 CV.
Las prestaciones son buenas teniendo en cuenta la tara del vehículo, pero lo que mejor valoramos es la facilidad de subir de vueltas y por tanto recuperar velocidad, además la acción del cambio automático es casi inapreciable.
En la nueva versión del Amarok, también destaca la incorporación de los frenos de disco ventilados en el tren trasero, detalle que nos permite parar el vehículo con prontitud y total seguridad.
En cuanto a los consumos, la cifra media se ha reducido, ya que cuando montaba el motor tdi de 2 litros, se movía muy cerca de los 10 litros a los 100 kilómetros y ahora es fácil conseguir medias de tan solo 8 litros a los 100 kilómetros.
En marcha es dónde el Volkswagen Amarok siempre ha sido superior a sus rivales, especialmente en las versiones de suspensión convencional (con ballestas), ya que estas son muy secas con el vehículo descargado. Esta distáncia se ha rebajado ya que el nuevo Nissan Navara (recordemos que es la base del Clase X de Mercedes) dispone de un esquema de suspensiones traseras independientes. El Volkswagen es inalcanzable por parte del vehiculo nipón en tacto de dirección, poténcia y calidad de frenada y respuesta y finura del motor V6.
En nuestro caso, la prueba de Amarok, se centró sobretodo por pistas y carretera, ya que por autopista desde buen principio, ha sido un excelente rodador.
En el caso de la conducción off-road, a pesar de que la monta de neumáticos no era muy aventurera ( Bridgestone Dueler H/P Sport 225/50 de 20 pulgadas) este coche es capaz de traccionar de manera soberbia en cualquier tipo de situación, incluso con caminos muy embarrados y torrentes por dónde pasaba bastante agua, transmite mucha seguridad y avanza con decisión.
No disponemos de reductora, ya que esta es la versión de tracción total permanente automática, hay otra de tracción total conectable con reductora, para afrontar terrenos y situaciones muy complicadas, pero con esta versión “básica” nosotros pasamos por sitios complicados sin despeinarnos.
Esta versión probada, aporta muchas virtudes a la conducción sobre asfalto y en condiciones de lluvia o nieve, ya que al ser siempre 4×4, nos permite tener a nuestro ángel de la guarda siempre atento y nos evita las culeadas típicas de este tipo de vehículos.
Para un uso lúdico o incluso profesional apenas echaremos de menos la reductora sino tenemos que tirar de un remolque de mucho peso o hacer 4×4 muy complicado.
También contamos con ayudas electrónicas como el control de descenso (cuya velocidad se regula con el acelerador y el freno), el asistente de arranque en cuestas o el ABS off-road, que permite un mayor grado de bloqueo a bajas velocidades.
El interior ha experimentado un importante salto adelante, con un salpicadero que ahora ofrece el tacto blando típico de los turismos de la marca, unos asientos muy cómodos, tanto delante cómo atrás y unas posibilidades de equipamiento impensables hasta la llegada de este modelo en la categoría.
Delante sobresale el enorme confort de marcha, con mucho espacio y una buena visión delantera (trasera no, cómo es habitual en este tipo de Pick-ups).
Detrás es más cómodo que sus competidores, con unos asientos con respaldo menos vertical, aunque se hecha en falta algo más de espacio para las piernas.
La caja es grande y la tapa a modo de persiana que equipaba nuestra unidad de pruebas es muy útil.
Valoración Final
Desde nuestro punto de vista, Volkswagen sigue marcando la pauta en este segmento, al igual que sucede con el Golf en el de los Compactos, puede que ahora la diferencia sea menor, pero aún mantiene el título de referencia del segmento. Su precio es muy Premium, 46.000 euros, mayor que la mayoría de sus competidores, pero el producto también es superior.
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